Aquí os facilitamos un plano de París, donde señalamos los lugares de interés más destacados para visitar:
1. Basílica del Sagrado Corazón (Sacré Coeur)
Nos encontramos la Basílica situada en pleno alto de la colina, desde donde la vista de París es realmente espectacular.
Sus orígenes datan de 1870. En este año, Francia estaba en guerra con Alemania y no vivía su mejor momento, ya que parte de su territorio se hallaba ocupado por el enemigo y además las relaciones con el Vaticano no pasaban por su mejor momento.
En 1873, la Asamblea Nacional aprueba el proyecto, y con ello se da luz verde de forma definitiva a la construcción de la iglesia.
En 1919, la iglesia se consagra como Basílica, lo que la convierte en lugar de peregrinaje, un santuario que atrae cada año a miles de peregrinos de toda Francia y el mundo entero.
2. Moulin rouge
Se trata de un famoso cabaret tradicional parisino, que fue construido en el año 1889 por el catalán Josep Oller. Está situado en el barrio de Pigalle, en el Boulevard de Clichy, al pie de Montmartre. Es famoso por el gran molino rojo que tiene en la azotea del edificio. El Moulin Rouge es un símbolo emblemático de la noche parisina, el edificio posee una rica historia que aún continúa.
Resulta más atractivo verlo y pasear por esta avenida de noche. Y además, hay diferentes bares en los que poder cenar y luego tomar una copa.
Resulta más atractivo verlo y pasear por esta avenida de noche. Y además, hay diferentes bares en los que poder cenar y luego tomar una copa.
La plaza de los pintores (Montmartre)
En la ciudad bohemia por antonomasia. Montmartre se encuentra situada al norte de París, en el "arrondisement" 18, en lo alto de una gran colina visible desde prácticamente toda la ciudad, y fácilmente distinguible por la espectacular imagen del Sagrado Corazón de París.
El Barrio está formado por casas tradicionales de 2-3 pisos de altura, la mayoría convertidos en restaurantes y tiendas de recuerdos, y es que Montmartre es cita ineludible para los millones de visitantes que acuden año tras año a París. El lugar más mágico y bohemio de Montmartre es sin duda la Place du Tertre, más conocida por los turistas como la Plaza de los Pintores de París, ya que cientos de pintores, caricaturistas y dibujantes se dan cita día tras día ofreciendo sus obras y servicios a todos los numerosos turistas (y no turistas) que día tras día recorren esta mmítica plaza parisina.
El Barrio está formado por casas tradicionales de 2-3 pisos de altura, la mayoría convertidos en restaurantes y tiendas de recuerdos, y es que Montmartre es cita ineludible para los millones de visitantes que acuden año tras año a París. El lugar más mágico y bohemio de Montmartre es sin duda la Place du Tertre, más conocida por los turistas como la Plaza de los Pintores de París, ya que cientos de pintores, caricaturistas y dibujantes se dan cita día tras día ofreciendo sus obras y servicios a todos los numerosos turistas (y no turistas) que día tras día recorren esta mmítica plaza parisina.
3. El Arco del Triunfo
El Arco del Triunfo se sitúa en la Place de l'Étoile (Plaza de la Estrella), que se llama así por las doce avenidas que convergen en la plaza, formando cada una de ellas un vértice de la estrella dibujada alrededor del Arco. Una de estas avenidas es la de los Campos Elíseos, famosa en todo el mundo.
Este magnífico monumento fue ordenado construir por Napoleón Bonaparte en 1806 tras la victoria en la Batalla de Austerlitz. Está diseñado por Chalgrin, inspirándose en la arquitectura romana. La construcción del monumento no se finalizó hasta 30 años después del inicio de su levantamiento. Sus dimensiones: 50 metros de altura y 45 metros de ancho, lo que le convierte en el tercer Arco del Triunfo de mayor envergadura en el mundo.
Cada uno de sus cuatro pilares posee una escultura y un significado propio: Le Triomphe (El Triunfo), La Résistance (La Resistencia), La Paix (La Paz) y La Marseillaise (La Marsellesa).
En los muros exteriores del Arco del Triunfo están grabados los nombres de revolucionarios de la época, así como las victorias de Napoleon I, mientras que en los muros interiores están inscritos los nombres de los 558 Generales del Imperio Francés. Dentro del Arco se esconde un museo dedicado a la historia y contrucción de este monumento y en su techo se puede disfrutar de unas fabulosas vistas.
Además, a los pies del Arco del Triunfo se encuentra la Tumba del Soldado Desconocido de la Primera Guerra Mundial, en la cual se puede leer: ICI REPOSE UN SOLDAT FRANÇAIS MORT POUR LA PATRIE 1914-1918 ("Aquí yace un soldado francés que murió por la Patria 1914-1918") donde una llama eterna se enciende en honor a los soldados que lucharon y dieron su vida por Francia.
Este magnífico monumento fue ordenado construir por Napoleón Bonaparte en 1806 tras la victoria en la Batalla de Austerlitz. Está diseñado por Chalgrin, inspirándose en la arquitectura romana. La construcción del monumento no se finalizó hasta 30 años después del inicio de su levantamiento. Sus dimensiones: 50 metros de altura y 45 metros de ancho, lo que le convierte en el tercer Arco del Triunfo de mayor envergadura en el mundo.
Cada uno de sus cuatro pilares posee una escultura y un significado propio: Le Triomphe (El Triunfo), La Résistance (La Resistencia), La Paix (La Paz) y La Marseillaise (La Marsellesa).
En los muros exteriores del Arco del Triunfo están grabados los nombres de revolucionarios de la época, así como las victorias de Napoleon I, mientras que en los muros interiores están inscritos los nombres de los 558 Generales del Imperio Francés. Dentro del Arco se esconde un museo dedicado a la historia y contrucción de este monumento y en su techo se puede disfrutar de unas fabulosas vistas.
Además, a los pies del Arco del Triunfo se encuentra la Tumba del Soldado Desconocido de la Primera Guerra Mundial, en la cual se puede leer: ICI REPOSE UN SOLDAT FRANÇAIS MORT POUR LA PATRIE 1914-1918 ("Aquí yace un soldado francés que murió por la Patria 1914-1918") donde una llama eterna se enciende en honor a los soldados que lucharon y dieron su vida por Francia.
4. La Madaleine
Esta iglesia está situada en un lugar excepcional, dominando el Faubourg de Saint Honoré y los grandes boulevares. Cuando se llega a esta Iglesia por la Rue Royale, desde la Place de la Concorde, se ve esta Iglesia, fuera de lo común, con su estilo arquitectónico neoclásico.
Su construcción se prolongó durante casi 80 años en los que hubo cambios políticos e ideológicos diversos. Luis XV posó la primera piedra en 1765 y eligió como arquitecto a Contant d'Ivry. Habían comenzado ya las obras cuando sobrevino su muerte en 1777 y su alumno y sucesor, Guillaume-Martin Couture, modificó completamente el proyecto.
Finalmente, Napoleón I firmó un decreto donde establecía la edificación de un templo a la gloria del ejército francés. Se presentaron más de 80 proyectos al concurso, entre los cuales Napoleón eligió el de Vignon: un templo períptero, inspirado en la arquitectura greco-romana.
En 1807 Vignon encara la obra demoliendo casi todo lo existente pero recuperando las columnas.
Tras la muerte de Vignon.en 1828, Huvé prosiguió con la obra pese a las dificultades económicas. En 1830, la Monarquía de Julio previó nuevamente un santuario de reconciliación nacional. Las obras continuaron con las esculturas y bajorrelieves que adornan la iglesia, en las cuales intervinieron numerosos artistas: Lemaire, Ziegler, Marochetti, Rude, Pradier, entre otros. La puerta de bronce fue obra de Henri de Triqueti.
Por fin la iglesia fue inaugurada, el 24 de julio de 1842, día de Santa María Magdalena.
En 1846 se instaló el gran órgano de Cavaillé-Coll y en 1893 Lamaire concluyó el mosaico del ábside.
Su construcción se prolongó durante casi 80 años en los que hubo cambios políticos e ideológicos diversos. Luis XV posó la primera piedra en 1765 y eligió como arquitecto a Contant d'Ivry. Habían comenzado ya las obras cuando sobrevino su muerte en 1777 y su alumno y sucesor, Guillaume-Martin Couture, modificó completamente el proyecto.
Finalmente, Napoleón I firmó un decreto donde establecía la edificación de un templo a la gloria del ejército francés. Se presentaron más de 80 proyectos al concurso, entre los cuales Napoleón eligió el de Vignon: un templo períptero, inspirado en la arquitectura greco-romana.
En 1807 Vignon encara la obra demoliendo casi todo lo existente pero recuperando las columnas.
Tras la muerte de Vignon.en 1828, Huvé prosiguió con la obra pese a las dificultades económicas. En 1830, la Monarquía de Julio previó nuevamente un santuario de reconciliación nacional. Las obras continuaron con las esculturas y bajorrelieves que adornan la iglesia, en las cuales intervinieron numerosos artistas: Lemaire, Ziegler, Marochetti, Rude, Pradier, entre otros. La puerta de bronce fue obra de Henri de Triqueti.
Por fin la iglesia fue inaugurada, el 24 de julio de 1842, día de Santa María Magdalena.
En 1846 se instaló el gran órgano de Cavaillé-Coll y en 1893 Lamaire concluyó el mosaico del ábside.
5. PlaÇe Vendôme
Fue edificada entre la segunda mitad del siglo XVII a la primera del XVIII, como una plaza de líneas austeras encaminadas a realzar en el centro la efigie de Luis XIV y que fue derribada en época revolucionaria.
Luego se alzó una columna de inspiración napoleónica.
La plaza destaca, además de por la gran columna, por sus magníficos edificios, entre los que se encuentra el Ministerio de Justicia y numerosas casas comerciales, joyerías,... de alto nivel. Al lado de la plaza pasa la Rue St-Honoré, que destaca por sus tiendas de alta costura.
Luego se alzó una columna de inspiración napoleónica.
La plaza destaca, además de por la gran columna, por sus magníficos edificios, entre los que se encuentra el Ministerio de Justicia y numerosas casas comerciales, joyerías,... de alto nivel. Al lado de la plaza pasa la Rue St-Honoré, que destaca por sus tiendas de alta costura.
6. Jardín de las Tullerías (Jardins des Tuileries)
El Jardín de las Tullerías, capricho de Catalina de Médicis, es el más antiguo jardín de la ciudad y fue el primer jardín público.
Desde el siglo XII este vasto espacio había sido ocupado por fábricas de "tuiles" (especie de tejas, de donde deriva su nombre) y huertas. En 1564,Catalina de Médicis hizo construir allí un palacio, el Palacio de Tuileries, rodeado de un gran jardín al estilo florentino, donde destacaban fuentes adornadas de esculturas, un laberinto, gran cantidad de árboles ornamentales y frutales, césped, macetas con flores, huerto y hasta una viña...
Grandes recepciones y fiestas fastuosas se celebraron en estos jardines, que para entonces eran jardines personales de la reina y estaban rodeados por altos muros. En 1594 se plantaron cipreses y gran cantidad de moreras para la crianza de gusanos de seda. Caballerizas y jaulas con pájaros tuvieron también su lugar en este pequeño paraiso.
En 1664, Luis XIV encargó a André Le Nôtre el rediseño del jardín, abriéndolo a la gente de la alta sociedad; fue el primer jardín público de París. Sus avenidas arboladas, donde alternaban arces, castaños de indias, cipreses y olmos, se fueron poblando de estatuas. Tulipanes y claveles llenaban de color la primavera y el verano. Sucesivamente aparecieron los estanques, primero el gran estanque redondo, luego los dos más pequeños y finalmente el estanque octogonal al oeste en 1669.
Cuando la corte se estableció en el Palacio de Versalles sólo se hicieron en las Tullerías trabajos de mantenimiento. Al regreso, en 1715, trayeron consigo gran cantidad de estatuas que dispersaron en el jardín.
En tiempos de la Revolución, palacio y jardines fueron el centro del poder republicano. Un plan de reestructuración transformó el jardín italiano en inglés: Aumentaron los espacios de césped y se reemplazaron macetas por árboles y arbustos con flores perfumadas... algunos, pensando que era demasiado lujoso, sugirieron utilizarlo como huerta. La idea no prosperó sino que por el contrario, se pensaba en embellecerlo con pórticos, palestras, propileos... Luego de la caida de Robespierre, este proyecto fue abandonado.
A fines del siglo XVIII el jardín se volcaba hacia el neoclasicismo, poblado de estatuas clásicas restauradas y tomadas de la nobleza. Se plantaron naranjos y plantas cítricas y las flores se vendían en subastas, en tanto que el acceso al público fue restringido. Napoleón continuó el plan real de reunir el Louvre al Palacio de Tullerías y erigió el Arco de Triunfo del Carrousel, al tiempo que volvieron las grandes fiestas en los jardines.
En 1862 se construyó el Jeu de Paume, una suerte de espacio dedicado a un juego que podríamos llamar predecesor del tenis.
Los sucesos de la Comuna en 1870 acabaron por incendiar el palacio de Tullerías, que finalmente nunca fue recuperado y se decidió arrasar. Hacia fines de siglo, los jardines recuperaron su caracter público y se desarrollaron eventos sociales de importancia, tales como el "Salón del Automóvil" y festejos de fechas importantes. Las guerras mundiales afectaron seriamente el estado del jardín, que fue progresivamente restaurado para recuperar su rol festivo.
El bicentenario de la revolución, en 1889, marcó el fin de estas festividades, para consagrar el Jardín de Tullerías como espacio puramente de paseo. El proyecto de restauración intentó respetar la historia del Jardín, conservando estanques, vegetación y esculturas, constituyendo un verdadero museo de arte al aire libre.
Vía: www.mundocity.com
Desde el siglo XII este vasto espacio había sido ocupado por fábricas de "tuiles" (especie de tejas, de donde deriva su nombre) y huertas. En 1564,Catalina de Médicis hizo construir allí un palacio, el Palacio de Tuileries, rodeado de un gran jardín al estilo florentino, donde destacaban fuentes adornadas de esculturas, un laberinto, gran cantidad de árboles ornamentales y frutales, césped, macetas con flores, huerto y hasta una viña...
Grandes recepciones y fiestas fastuosas se celebraron en estos jardines, que para entonces eran jardines personales de la reina y estaban rodeados por altos muros. En 1594 se plantaron cipreses y gran cantidad de moreras para la crianza de gusanos de seda. Caballerizas y jaulas con pájaros tuvieron también su lugar en este pequeño paraiso.
En 1664, Luis XIV encargó a André Le Nôtre el rediseño del jardín, abriéndolo a la gente de la alta sociedad; fue el primer jardín público de París. Sus avenidas arboladas, donde alternaban arces, castaños de indias, cipreses y olmos, se fueron poblando de estatuas. Tulipanes y claveles llenaban de color la primavera y el verano. Sucesivamente aparecieron los estanques, primero el gran estanque redondo, luego los dos más pequeños y finalmente el estanque octogonal al oeste en 1669.
Cuando la corte se estableció en el Palacio de Versalles sólo se hicieron en las Tullerías trabajos de mantenimiento. Al regreso, en 1715, trayeron consigo gran cantidad de estatuas que dispersaron en el jardín.
En tiempos de la Revolución, palacio y jardines fueron el centro del poder republicano. Un plan de reestructuración transformó el jardín italiano en inglés: Aumentaron los espacios de césped y se reemplazaron macetas por árboles y arbustos con flores perfumadas... algunos, pensando que era demasiado lujoso, sugirieron utilizarlo como huerta. La idea no prosperó sino que por el contrario, se pensaba en embellecerlo con pórticos, palestras, propileos... Luego de la caida de Robespierre, este proyecto fue abandonado.
A fines del siglo XVIII el jardín se volcaba hacia el neoclasicismo, poblado de estatuas clásicas restauradas y tomadas de la nobleza. Se plantaron naranjos y plantas cítricas y las flores se vendían en subastas, en tanto que el acceso al público fue restringido. Napoleón continuó el plan real de reunir el Louvre al Palacio de Tullerías y erigió el Arco de Triunfo del Carrousel, al tiempo que volvieron las grandes fiestas en los jardines.
En 1862 se construyó el Jeu de Paume, una suerte de espacio dedicado a un juego que podríamos llamar predecesor del tenis.
Los sucesos de la Comuna en 1870 acabaron por incendiar el palacio de Tullerías, que finalmente nunca fue recuperado y se decidió arrasar. Hacia fines de siglo, los jardines recuperaron su caracter público y se desarrollaron eventos sociales de importancia, tales como el "Salón del Automóvil" y festejos de fechas importantes. Las guerras mundiales afectaron seriamente el estado del jardín, que fue progresivamente restaurado para recuperar su rol festivo.
El bicentenario de la revolución, en 1889, marcó el fin de estas festividades, para consagrar el Jardín de Tullerías como espacio puramente de paseo. El proyecto de restauración intentó respetar la historia del Jardín, conservando estanques, vegetación y esculturas, constituyendo un verdadero museo de arte al aire libre.
Vía: www.mundocity.com
7. Museo del Louvre
Es el museo nacional de Francia. Es considerado el más importante del mundo, por la riqueza de sus colecciones y por la influencia que ha ejercido en los restantes museos del planeta.Está ubicado en el antiguo palacio real del Louvre. Sus extensas colecciones son el resultado de un doble esfuerzo histórico. Al coleccionismo desarrollado por la monarquía francesa a lo largo de varios siglos, se sumó el esfuerzo de los hombres de la Ilustración, la labor desamortizadora de la Revolución francesa y las campañas arqueológicas y compras impulsadas durante todo el siglo XIX. La apertura del Louvre en 1793 significó, dentro de la historia de los museos, el traspaso de las colecciones privadas de las clases dirigentes (monarquía, aristocracia e Iglesia) a galerías de propiedad pública para disfrute del conjunto de la sociedad. Por ello el Louvre constituyó el precedente de todos los grandes museos nacionales europeos y norteamericanos, y de hecho fue el modelo para muchos de ellos.
Es el museo de arte más visitado del mundo y el más recordado por varias de sus obras maestras, como La Gioconda de Leonardo da Vinci.
http://www.louvre.fr
8. Les Halles
Una de las zonas más bellas de París para el pasear es la de Les Halles.
En el entorno queda la Bolsa de Comercio, la iglesia de Saint-Eustache, el Forum, y muy cerca se halla el Centro de Arte y Cultura Georges Pompidou, la iglesia de St-Merri y la famosa Tour de St-Jacques.
La Tour de St-Jacques es de origen medieval. Fue edificada en el reinado de Francisco I, y pertenece a un estilo de gótico florido. Es el único resto de la iglesia, demolida en época de la Revolución Francesa.
La Tour tiene un sentido jacobeo importante. Era el punto de inicio del Camino de Santiago en París.La Iglesia de Saint-Eustache se inició en el siglo XVI y se terminó bien avanzado el XVII, pero respetando el estilo gótico. Además ha sufrido algunas alteraciones posteriores. Esta iglesia está muy ligada a la historia francesa. Aquí fueron bautizados Richelieu y Moliere, entre otros personajes célebres.
El Forum de Les Halles ocupa buena parte del complejo mercantil de antaño, y es una obra moderna que incluye luminosas galerías, tiendas, museos, cines, etc. Entre los museos está el Oceanográfico de Cousteau.
La Bolsa de Comercio es un edificio redondo de fines del siglo XIX.
En el entorno queda la Bolsa de Comercio, la iglesia de Saint-Eustache, el Forum, y muy cerca se halla el Centro de Arte y Cultura Georges Pompidou, la iglesia de St-Merri y la famosa Tour de St-Jacques.
La Tour de St-Jacques es de origen medieval. Fue edificada en el reinado de Francisco I, y pertenece a un estilo de gótico florido. Es el único resto de la iglesia, demolida en época de la Revolución Francesa.
La Tour tiene un sentido jacobeo importante. Era el punto de inicio del Camino de Santiago en París.La Iglesia de Saint-Eustache se inició en el siglo XVI y se terminó bien avanzado el XVII, pero respetando el estilo gótico. Además ha sufrido algunas alteraciones posteriores. Esta iglesia está muy ligada a la historia francesa. Aquí fueron bautizados Richelieu y Moliere, entre otros personajes célebres.
El Forum de Les Halles ocupa buena parte del complejo mercantil de antaño, y es una obra moderna que incluye luminosas galerías, tiendas, museos, cines, etc. Entre los museos está el Oceanográfico de Cousteau.
La Bolsa de Comercio es un edificio redondo de fines del siglo XIX.
La tour de St-Jacques Saint Eustache
Vía: http://www.paris.citysam.de Via: www.wikipedia.es
Vía: http://www.paris.citysam.de Via: www.wikipedia.es
9. PlaÇe des Vosges
Anteriormente conocida como la Place Royale, la Place des Vosges fue construída bajo el reinado de Henri IV y era utilizada como un lugar habitual para batirse en duelo. Es una de las plazas más antiguas de París y también uno de los lugares más bellos de la ciudad. Con sus músicos callejeros y galerías de arte hoy en día es uno de los destinos más populares del Marais.
Esta elegante plaza renacentista se compone de pabellones simétricos construídos en ladrillo que descansan sobre arcos de piedra. En el centro hay un jardín con hileras de árboles, bancos y areas de recreo para los pequeños. Victor Hugo vivió en esta plaza en el edificio Hôtel de Rohan-Guéménée, que hoy es un museo gratuíto donde se puede visitar el hogar del escritor, el museo “Maison de Victor Hugo”. Otro museo gratuíto es el Musée Carnavalet, que está dedicado a la historia de la ciudad y que tiene unos jardines espectaculares.
Esta elegante plaza renacentista se compone de pabellones simétricos construídos en ladrillo que descansan sobre arcos de piedra. En el centro hay un jardín con hileras de árboles, bancos y areas de recreo para los pequeños. Victor Hugo vivió en esta plaza en el edificio Hôtel de Rohan-Guéménée, que hoy es un museo gratuíto donde se puede visitar el hogar del escritor, el museo “Maison de Victor Hugo”. Otro museo gratuíto es el Musée Carnavalet, que está dedicado a la historia de la ciudad y que tiene unos jardines espectaculares.
10. La Bastille
Entre los años 1370 y 1383 se construyó una fortaleza destinada a proteger la puerta de San Antonio, en el este de Paris.
En tiempos de Francisco I, habiendo perdido su utilidad militar, fue utilizada para recepciones reales y como tesorería, y más tarde el cardenal Richelieu transformó la fortaleza en prisión.
La toma de la Bastilla marcó el comienzo de la Revolución en 1789.
Tras su destrucción, algunas piedras sirvieron para la construcción del Puente de la Concorde y con otras la empresa encargada de la demolición hizo maquetas de la Bastilla a modo de recuerdos. Parte de los cimientos pueden verse aún en la estación de metro Bastille.
Después de los sucesos que provocaron la caida de Carlos X en 1830, tras 3 días de revueltas, el nuevo rey Luis Felipe decidió honrar a las víctimas de aquellos días. Entre 1833 y 1840 se erigió una columna, llamada "Columna de Julio", de 52 metros de altura, rematada por un genio que simboliza la Libertad, llevando en sus manos una cadena rota y una antorcha encendida.
Frente a la Plaza de la Bastilla fue inaugurada en 1989 la Opera Bastilla, en conmemoración del bicentenario de la toma de la Bastilla. El moderno edificio dedicado a la ópera fue idea del presidente Miterrand, quien pretendió una ópera "popular y moderna", a fin de democratizar el arte lírico y la música clásica. El arquitecto ganador del concurso organizado para el proyecto fue el arquitecto uruguayo-canadiense Carlos Ott, quien ideó el imponente edificio circular vidriado, con capacidad para 2700 plazas.
En tiempos de Francisco I, habiendo perdido su utilidad militar, fue utilizada para recepciones reales y como tesorería, y más tarde el cardenal Richelieu transformó la fortaleza en prisión.
La toma de la Bastilla marcó el comienzo de la Revolución en 1789.
Tras su destrucción, algunas piedras sirvieron para la construcción del Puente de la Concorde y con otras la empresa encargada de la demolición hizo maquetas de la Bastilla a modo de recuerdos. Parte de los cimientos pueden verse aún en la estación de metro Bastille.
Después de los sucesos que provocaron la caida de Carlos X en 1830, tras 3 días de revueltas, el nuevo rey Luis Felipe decidió honrar a las víctimas de aquellos días. Entre 1833 y 1840 se erigió una columna, llamada "Columna de Julio", de 52 metros de altura, rematada por un genio que simboliza la Libertad, llevando en sus manos una cadena rota y una antorcha encendida.
Frente a la Plaza de la Bastilla fue inaugurada en 1989 la Opera Bastilla, en conmemoración del bicentenario de la toma de la Bastilla. El moderno edificio dedicado a la ópera fue idea del presidente Miterrand, quien pretendió una ópera "popular y moderna", a fin de democratizar el arte lírico y la música clásica. El arquitecto ganador del concurso organizado para el proyecto fue el arquitecto uruguayo-canadiense Carlos Ott, quien ideó el imponente edificio circular vidriado, con capacidad para 2700 plazas.
11.Catedral de Nôtre-Dame
La Catedral de Notre-Dame de París (Cathédrale Notre-Dame), es una de las catedrales francesas más antiguas de estilo gótico, se empezó a construir en el año 1163 y se terminó en el año 1345. Dedicada a María, Madre de Jesucristo (de ahí el nombre Notre-Dame, Nuestra Señora), se sitúa en la pequeña Isla de la Cité.
La catedral surge íntimamente ligada a la idea del esplendor gótico. La arquitectura gótica es un instrumento poderoso en el seno de una sociedad que ve, en el inicio del siglo XI, transformarse la vida urbana a un ritmo acelerado. La ciudad resurge con una extrema importancia en el campo político, en el campo económico (espejo de las crecientes relaciones comerciales), ascendiendo también, por su lado, la burguesía adinerada y la influencia del clero urbano. El resultado de esto es una sustitución también de las necesidades de construcción religiosa fuera de las ciudades, en las comunidades monárquicas rurales, por el nuevo símbolo de la prosperidad urbana, la catedral gótica.
Destaca particularmente su magnífico órgano Cavaille-Coll, siendo la plaza de organista titular de Notre-Dame uno de los más altos honores a los que puede aspirar un organista. Esta plaza fue ocupada por el genial organista y compositor francés Louis Vierne entre los años 1900 y 1937, época que se recuerda como la del mayor esplendor de la catedral como centro artístico y musical.
La catedral surge íntimamente ligada a la idea del esplendor gótico. La arquitectura gótica es un instrumento poderoso en el seno de una sociedad que ve, en el inicio del siglo XI, transformarse la vida urbana a un ritmo acelerado. La ciudad resurge con una extrema importancia en el campo político, en el campo económico (espejo de las crecientes relaciones comerciales), ascendiendo también, por su lado, la burguesía adinerada y la influencia del clero urbano. El resultado de esto es una sustitución también de las necesidades de construcción religiosa fuera de las ciudades, en las comunidades monárquicas rurales, por el nuevo símbolo de la prosperidad urbana, la catedral gótica.
Destaca particularmente su magnífico órgano Cavaille-Coll, siendo la plaza de organista titular de Notre-Dame uno de los más altos honores a los que puede aspirar un organista. Esta plaza fue ocupada por el genial organista y compositor francés Louis Vierne entre los años 1900 y 1937, época que se recuerda como la del mayor esplendor de la catedral como centro artístico y musical.
Ayuntamiento de París ( Hôtel de Ville)
La plaza y el edificio del Ayuntamiento están estrechamente ligados a la historia de Paris desde épocas medievales. La plaza no era más que una zona pedregosa hasta que en 1141 los mercaderes que transportaban mercancías por el Sena establecieron allí un puerto, con el objeto de aliviar al de la Cité.
La pequeña plaza de Greve fue escenario de festejos, de revueltas y también de ejecuciones y suplicios. Ya en tiempos de la Revolución, fue en la Place de Greve donde se utilizó la guillotina por primera vez.
En el siglo XVI, bajo el gobierno de Francisco I, la "casa de los pilares" fue reemplazada por un verdadero palacio renacentista. Según el diseño del arquitecto italiano Boccador, la construcción se desarrolló entre 1533 y 1628. En 1836 y 1850, bajo el gobierno de Luis Felipe, el palacio fue ampliamente refaccionado, agrandado y decorado, conservando siempre la fachada renacentista.
En 1871, debido a una revuelta en la caída de Napoleón, este edificio se redujo a cenizas, al igual que todos los archivos municipales.
El edificio pudo ser reconstruido tal como entre 1873 y 1882. En sus fachadas, numerosos nichos y pilares albergan 108 personajes célebres de la historia de París y 30 estatuas que representan ciudades francesas. El interior ricamente adornado con pinturas, detalles en oro, mármoles y finas maderas testimonia la magnificencia de la III República.
Desde 1977, el Alcalde de París dirige en el Hotel de Ville las sesiones del Concejo Municipal, abiertas al público los lunes.
La pequeña plaza de Greve fue escenario de festejos, de revueltas y también de ejecuciones y suplicios. Ya en tiempos de la Revolución, fue en la Place de Greve donde se utilizó la guillotina por primera vez.
En el siglo XVI, bajo el gobierno de Francisco I, la "casa de los pilares" fue reemplazada por un verdadero palacio renacentista. Según el diseño del arquitecto italiano Boccador, la construcción se desarrolló entre 1533 y 1628. En 1836 y 1850, bajo el gobierno de Luis Felipe, el palacio fue ampliamente refaccionado, agrandado y decorado, conservando siempre la fachada renacentista.
En 1871, debido a una revuelta en la caída de Napoleón, este edificio se redujo a cenizas, al igual que todos los archivos municipales.
El edificio pudo ser reconstruido tal como entre 1873 y 1882. En sus fachadas, numerosos nichos y pilares albergan 108 personajes célebres de la historia de París y 30 estatuas que representan ciudades francesas. El interior ricamente adornado con pinturas, detalles en oro, mármoles y finas maderas testimonia la magnificencia de la III República.
Desde 1977, el Alcalde de París dirige en el Hotel de Ville las sesiones del Concejo Municipal, abiertas al público los lunes.
12. Quartier Latin
Está situado a escasos metros de Notre Dame, cruzando el Sena, y se trata de uno de los lugares más animados, sobre todo en la tarde-noche parisina.
Está formado por una serie de pequeñas calles donde no hay más que bares y restaurantes de todos los lugares del mundo y para todos los bolsillos. Sin lugar a duda, el Barrio latino es uno de los pocos lugares donde se puede comer barato en Paris.
Es un lugar donde es muy agradable pasear, y donde el no conocer la lengua francesa no suele ser un gran inconveniente, ya que está lleno de turistas.
Está formado por una serie de pequeñas calles donde no hay más que bares y restaurantes de todos los lugares del mundo y para todos los bolsillos. Sin lugar a duda, el Barrio latino es uno de los pocos lugares donde se puede comer barato en Paris.
Es un lugar donde es muy agradable pasear, y donde el no conocer la lengua francesa no suele ser un gran inconveniente, ya que está lleno de turistas.
13. Palais et Jardins du Luxembourg
El Palacio de Luxemburgo es actualmente la sede del Senado francés y sus jardines, abiertos al público, son considerados por muchos como los más bonitos de la ciudad.
La construcción de este palacio y el diseño de sus jardines se debieron a un antojo de María de Médicis, quien decidió construir su propio palacio "a la italiana".
Después de algunas negociaciones, la reina logró comprar en 1612 la residencia de un duque de la zona, llamado François de Luxembourg.
María de Médicis convocó al arquitecto Salomon de Brosse para que diseñara su palacio al estilo del Palacio Pitti de su Florencia natal, para lo cual hizo demoler totalmente la residencia adquirida.
El gran palacio pasó por diferentes propietarios de la nobleza hasta que durante la Revolución fue confiscado como bien nacional. Sirvió de prisión durante la época del Terror y ya en el siglo XIX, tras diferentes trabajos de acondicionamiento pasó a ser sede del Senado hasta la actualidad.
15, rue de Vaugirard
La construcción de este palacio y el diseño de sus jardines se debieron a un antojo de María de Médicis, quien decidió construir su propio palacio "a la italiana".
Después de algunas negociaciones, la reina logró comprar en 1612 la residencia de un duque de la zona, llamado François de Luxembourg.
María de Médicis convocó al arquitecto Salomon de Brosse para que diseñara su palacio al estilo del Palacio Pitti de su Florencia natal, para lo cual hizo demoler totalmente la residencia adquirida.
El gran palacio pasó por diferentes propietarios de la nobleza hasta que durante la Revolución fue confiscado como bien nacional. Sirvió de prisión durante la época del Terror y ya en el siglo XIX, tras diferentes trabajos de acondicionamiento pasó a ser sede del Senado hasta la actualidad.
15, rue de Vaugirard
14. Musée d´Orsay
Se encentra prácticamente frente al Museo del Louvre, al otro lado del Sena. Es uno de los museos más "nuevos" de Francia y el tercero más visitado. Su característica particular es que fue instalado en la antigua estación de trenes de la ciudad.
En vísperas de la Exposición Universal, el Estado cedió el terreno a la compañía de ferrocarriles de Orleans. Se proyectaba construir en el lugar una nueva estación de trenes en una situación más céntrica que la estación de Austerlitz, entonces la más importante. Hasta 1939 funcionó la estación.
Los seleccionados para encarar el proyecto fueron Lucien Magne, Emile Bénard y Victor Laloux (éste último encargado de la restauración del Ayuntamiento de París). El desafío era grande: se trataba de integrar una fría estructura de hierro en un barrio elegante y en proximidades del Louvre y otros palacios. Dos años llevó la construcción y el 14 de julio de 1900 se inauguraron la estación y el lujoso hotel de Orsay.
La Dirección de Museos de Francia buscaba por entonces un lugar donde alojar las colecciones de arte de la segunda mitad del siglo XIX, y el edificio de la antigua estación, a punto de ser demolido y reemplazado por un moderno hotel, atrajo la atención y fue declarado monumento histórico en 1978, al tiempo que el presidente Valéry Giscard d'Estaing autorizaba la creación del nuevo museo. Su sucesor, François Mitterrand, fue quien el 1° de Diciembre de 1986 inauguró el Museo de Orsay.
Las colecciones reunidas en el Museo de Orsay abarcan el período 1848 a 1914 y fueron trasladadas desde el Louvre (obras de artistas nacidos a partir de 1820), el Museo del Jeu de Paume (consagrado al impresionismo desde 1947) y el Museo de Arte Moderno.
Entre los autores y obras más destacados que pueden admirarse en el Museo de Orsay podemos citar a Ingres (La Fuente ), Degas (Bailarina vestida), Millet (Angelus, La Primavera),Camille Corot (Una matiné. La danza de las ninfas.), Courbet (El origen del mundo, El taller del pintor), Monet (La merienda campestre), Renoir (El Molino de la Galette), Cezanne (La mujer de la cafetera, El retrato de la madre del artista), Gauguin (Autorretrato con Cristo amarillo), Van Gogh(La arlesiana, La iglesia de Auvers) y Manet (Olympia).
En vísperas de la Exposición Universal, el Estado cedió el terreno a la compañía de ferrocarriles de Orleans. Se proyectaba construir en el lugar una nueva estación de trenes en una situación más céntrica que la estación de Austerlitz, entonces la más importante. Hasta 1939 funcionó la estación.
Los seleccionados para encarar el proyecto fueron Lucien Magne, Emile Bénard y Victor Laloux (éste último encargado de la restauración del Ayuntamiento de París). El desafío era grande: se trataba de integrar una fría estructura de hierro en un barrio elegante y en proximidades del Louvre y otros palacios. Dos años llevó la construcción y el 14 de julio de 1900 se inauguraron la estación y el lujoso hotel de Orsay.
La Dirección de Museos de Francia buscaba por entonces un lugar donde alojar las colecciones de arte de la segunda mitad del siglo XIX, y el edificio de la antigua estación, a punto de ser demolido y reemplazado por un moderno hotel, atrajo la atención y fue declarado monumento histórico en 1978, al tiempo que el presidente Valéry Giscard d'Estaing autorizaba la creación del nuevo museo. Su sucesor, François Mitterrand, fue quien el 1° de Diciembre de 1986 inauguró el Museo de Orsay.
Las colecciones reunidas en el Museo de Orsay abarcan el período 1848 a 1914 y fueron trasladadas desde el Louvre (obras de artistas nacidos a partir de 1820), el Museo del Jeu de Paume (consagrado al impresionismo desde 1947) y el Museo de Arte Moderno.
Entre los autores y obras más destacados que pueden admirarse en el Museo de Orsay podemos citar a Ingres (La Fuente ), Degas (Bailarina vestida), Millet (Angelus, La Primavera),Camille Corot (Una matiné. La danza de las ninfas.), Courbet (El origen del mundo, El taller del pintor), Monet (La merienda campestre), Renoir (El Molino de la Galette), Cezanne (La mujer de la cafetera, El retrato de la madre del artista), Gauguin (Autorretrato con Cristo amarillo), Van Gogh(La arlesiana, La iglesia de Auvers) y Manet (Olympia).
15. Palacio Nacional de los Inválidos (Hôtel National des Invalides)
Se trata de un imponente complejo arquitectónico francés del siglo XVII (1671-1676) que está situado en el séptimo distrito de París, a 400 metros de la Escuela Militar. Nació originariamente como residencia real para soldados y militares franceses retirados, lisiados o ancianos, pero hoy alberga diversas instalaciones religiosas y museos, así como diferentes servicios y dependencias para antiguos combatientes.
El sarcófago de Napoleón Bonaparte.
El mausoleo está organizado alrededor de los restos mortales del emperador Napoleón I. Éstos se situan en el centro de una cripta circular alrededor de la cual se encuentran las hazañas y los logros de su reinado. En la misma cripta, aunque en lugares menos expuestos, están enterrados también los generales Duroc, Bertrand y Lasalle. En el piso superior a la cripta, desde el que se puede observar el sepulcro imperial, están expuestas también los sarcófagos de José I de España y Jerôme Bonaparte, hermanos de Napoleón; Napoleón II, hijo de Napoleón; y los mariscales Foch y Lyautey, en diferentes compartimentos laterales.
Sólo siete años después de su muerte en la isla de Santa Elena, en 1821, fue trasladado el cuerpo de Napoleón Bonaparte a Francia, con el permiso de Inglaterra. En 1840 una nave francesa condujo los restos a Le Havre, para remontar luego todo el curso del Sena hasta llegar a París. El féretro desfiló por toda la ciudad, pasando bajo el Arco del Triunfo hasta finalizar en la iglesia de los Inválidos. Los restos fueron encerrados, como los de un faraón egipcio, en seis ataúdes: de hierro, caoba, plomo, madera de ébano y, por último, encina. Se los depositó posteriormente en el gran sarcófago pórfido rojo, en una cripta especialmente diseñada por el arquitecto Visconti. Velando al emperador hay doce enormes Victorias, obras de Pradier, simbolizando a todo el pueblo francés reunido con su héroe. A su lado se sitúa su hijo, el rey de Roma.
El mausoleo está organizado alrededor de los restos mortales del emperador Napoleón I. Éstos se situan en el centro de una cripta circular alrededor de la cual se encuentran las hazañas y los logros de su reinado. En la misma cripta, aunque en lugares menos expuestos, están enterrados también los generales Duroc, Bertrand y Lasalle. En el piso superior a la cripta, desde el que se puede observar el sepulcro imperial, están expuestas también los sarcófagos de José I de España y Jerôme Bonaparte, hermanos de Napoleón; Napoleón II, hijo de Napoleón; y los mariscales Foch y Lyautey, en diferentes compartimentos laterales.
Sólo siete años después de su muerte en la isla de Santa Elena, en 1821, fue trasladado el cuerpo de Napoleón Bonaparte a Francia, con el permiso de Inglaterra. En 1840 una nave francesa condujo los restos a Le Havre, para remontar luego todo el curso del Sena hasta llegar a París. El féretro desfiló por toda la ciudad, pasando bajo el Arco del Triunfo hasta finalizar en la iglesia de los Inválidos. Los restos fueron encerrados, como los de un faraón egipcio, en seis ataúdes: de hierro, caoba, plomo, madera de ébano y, por último, encina. Se los depositó posteriormente en el gran sarcófago pórfido rojo, en una cripta especialmente diseñada por el arquitecto Visconti. Velando al emperador hay doce enormes Victorias, obras de Pradier, simbolizando a todo el pueblo francés reunido con su héroe. A su lado se sitúa su hijo, el rey de Roma.
16. La Torre Eiffel
Es el símbolo de París por excelencia, y una visita ineludible.
Su imagen más internacional y un orgullo para la ciudad, algo impensable hace más de cien años, cuando la torre se estaba construyendo pese a la fuerte oposición de los intelectuales y los parisinos de la calle.
Es visitada cada año por más de 6 millones de visitantes.
Las obras para su construcción comenzaron en 1887 para conmemorar la Exposición Universal que celebraba el centenario de la Revolución Francesa, tras 3 años de estudios por parte de Eiffel y sus ayudantes, 3 años de lucha contra la opinión pública que no querían un "armat deoste" de hierro que no servía para nada y que costaría una millonada. Finalmente, un 31 de Marzo de 1889, fue la inauguración la Torre Eiffel, que pese a lo que había costado su construcción, en términos económicos y de lucha contra la voluntad popular, tenía una fecha de caducidad, ya que estaba pensado que se desarmase la estructura metálica en 1900, cuando terminase la Exposición Universal, y así hubiese sido de no ser porque a la armada francesa se le ocurrió hacer unas pruebas con equipos de radio en lo alto de la torre, descubriéndole un uso a la Torre de Eiffel para el que no había sido construida.
En la actualidad son varias las antenas que coronan la Torre Eiffel, y no solo de radio, sino también de televisión, y de hecho la presencia de estas antenas han elevado su altura, de los 312,27 metros que medía en 1889 hasta los 324 metros que mide en la actualidad, y que constituyen el punto más alto de la ciudad de Paris.
Subir a la Torre Eiffel
Subir a la Torre Eiffel es algo obligado, algo que todo aquel que visita Paris debe hacer, ya que si no se sube es casi como si no se hubiese estado allí.
Hay diferentes opciones (siempre pagando): Los más deportistas podrán utilizar las escaleras (1665 escalones ni más ni menos), y para los demás existen ascensores que nos podrán dejar en el primer piso o bien en el segundo piso. En las dos alturas donde se puede subir existen diferentes tiendas de recuerdos, además de dos restaurantes de lujo. Además, existe un tercer piso, que es la parte alta de la Torre Eiffel y se perciben perfectamente los movimientos de esta a poco que hay un poco de brisa.
En cuanto a la vista decir que es de las mejores de Paris.
Por la noche la Torre Eiffel de Paris permanece siempre iluminada, y cada media hora- 1 hora luce por espacio de 10 minutos una iluminación centelleante que constituye un verdadero espectáculo, siendo posible presenciarlo desde cualquier lugar de Paris y sus alrededores.
Es visitada cada año por más de 6 millones de visitantes.
Las obras para su construcción comenzaron en 1887 para conmemorar la Exposición Universal que celebraba el centenario de la Revolución Francesa, tras 3 años de estudios por parte de Eiffel y sus ayudantes, 3 años de lucha contra la opinión pública que no querían un "armat deoste" de hierro que no servía para nada y que costaría una millonada. Finalmente, un 31 de Marzo de 1889, fue la inauguración la Torre Eiffel, que pese a lo que había costado su construcción, en términos económicos y de lucha contra la voluntad popular, tenía una fecha de caducidad, ya que estaba pensado que se desarmase la estructura metálica en 1900, cuando terminase la Exposición Universal, y así hubiese sido de no ser porque a la armada francesa se le ocurrió hacer unas pruebas con equipos de radio en lo alto de la torre, descubriéndole un uso a la Torre de Eiffel para el que no había sido construida.
En la actualidad son varias las antenas que coronan la Torre Eiffel, y no solo de radio, sino también de televisión, y de hecho la presencia de estas antenas han elevado su altura, de los 312,27 metros que medía en 1889 hasta los 324 metros que mide en la actualidad, y que constituyen el punto más alto de la ciudad de Paris.
Subir a la Torre Eiffel
Subir a la Torre Eiffel es algo obligado, algo que todo aquel que visita Paris debe hacer, ya que si no se sube es casi como si no se hubiese estado allí.
Hay diferentes opciones (siempre pagando): Los más deportistas podrán utilizar las escaleras (1665 escalones ni más ni menos), y para los demás existen ascensores que nos podrán dejar en el primer piso o bien en el segundo piso. En las dos alturas donde se puede subir existen diferentes tiendas de recuerdos, además de dos restaurantes de lujo. Además, existe un tercer piso, que es la parte alta de la Torre Eiffel y se perciben perfectamente los movimientos de esta a poco que hay un poco de brisa.
En cuanto a la vista decir que es de las mejores de Paris.
Por la noche la Torre Eiffel de Paris permanece siempre iluminada, y cada media hora- 1 hora luce por espacio de 10 minutos una iluminación centelleante que constituye un verdadero espectáculo, siendo posible presenciarlo desde cualquier lugar de Paris y sus alrededores.
La estatua de la Libertad
Esta pequeña réplica de solo 12 metros se encuentra sobre el río Sena en la isla de los Cisnes, muy cerca de la parada de Grenelle del metro de París. Su ubicación se debe a las proximidades con el taller de Bartholdi, el diseñador de la Estatua de la Libertad original que se encuentra en Nueva York que necesitó de la ayuda de Eiffel para levantarla. La pequeña estatua de la libertad fue un regalo de la comunidad americana a Francia para celebrar los 100 años de la revolución francesa (1889). Como curiosidad, inicialmente la estatua miraba el centro de París, pero se le dió la vuelta para que saludara a su “hermana” de Nueva York, respetando así el deseo de su diseñador.
17. La Plaza del Trocadero
La plaza del Trocadero, o jardines del Trocadero, se encuentra en el XVI distrito de París, a la vera del río Sena y al otro lado de la Torre Eiffel. Ocupa una superficie de 93.930 m² y fue creado también para la Exposición Universal de 1937, en el lugar en el que antiguamente estaban ubicados los jardines del Palacio del Trocadero, un palacio de estilo morisco, obra de Jean-Charles Alphand, construido para la Exposición Universal de París de 1878. Se encuentra limitado a un lado por el río Sena y al otro por el Palacio de Chaillot.
La plaza es conocida por su célebre fuente de Varsovia (1937), una obra del arquitecto Roger-Henri Expert, conformada por una serie de estanques en cascada que alimentan una gran piscina rectangular donde hay cañones de agua que lanzan chorros desde los bordes. La plaza contiene una gran cantidad de esculturas de la década de 1930, como El hombre de Traverse y La mujer de Bacqué.
El nombre de la plaza rememora la Batalla de Trocadero, que tuvo lugar en la isla homónima situada en la Bahía de Cádiz.
La plaza es conocida por su célebre fuente de Varsovia (1937), una obra del arquitecto Roger-Henri Expert, conformada por una serie de estanques en cascada que alimentan una gran piscina rectangular donde hay cañones de agua que lanzan chorros desde los bordes. La plaza contiene una gran cantidad de esculturas de la década de 1930, como El hombre de Traverse y La mujer de Bacqué.
El nombre de la plaza rememora la Batalla de Trocadero, que tuvo lugar en la isla homónima situada en la Bahía de Cádiz.
18. Rue de Passy
En esta conocida calle de París, podemos encontrar además de tiendas de moda, muy buenas pastelerías.
Comienza en la Plaza del Trocadero, y si vamos andando por esa calle y continuamos por la calle Route de lacs à Passy, llegamos al Bosque de Boulogne.
Comienza en la Plaza del Trocadero, y si vamos andando por esa calle y continuamos por la calle Route de lacs à Passy, llegamos al Bosque de Boulogne.
19. Bois de Boulogne
El Bosque de Boulogne ocupa una gran extensión ( 846 hectáreas) al oeste de Paris y pertenece al 16º distrito.
Hacia 1315, Felipe el Hermoso edificó una pequeña capilla despues de un peregrinaje a Boulogne Sur Mer y el bosque tomó desde entonces su nombre. Si bien bajo el reinado de Luis XI se abrieron dos rutas en el bosque y en 1531 Francisco I hizo construir el Castillo de Madrid, los primeros intentos estudiados de acondicionamiento del bosque comenzaron con Enrique IV, quien hizo plantar miles de moreras, con la esperanza de fomentar la producción de gusanos de seda. Era para entonces un paseo de moda, y a fines del siglo XVIII se habían construido hermosas residencias en los accesos del bosque, entre ellas el Castillo de la Muette y la Bagatelle.
En 1852 el bosque pasó a ser propiedad de la ciudad de París, la cual se hizo cargo de acondicionarlo como paseo público. Napoleón III encomendó la ardua tarea al Barón Haussman.
Una de las zonas más bonitas del bosque es la que ocupa el Parque de la Bagatelle. Los terrenos eran propiedad del Conde de Artois, a quien María Antonieta hizo una apuesta diciéndole que era imposible construir un palacio en dos meses, y lo consiguieros, la residencia de la Bagatelle estuvo terminada. Fue ampliada con una orangerie, el Trianón, caballerizas y un gran rosedal, donde cada año desde 1907 se realizan concursos internacionales.
Metro: PORTE-DAUPHINE, PORTE-D'AUTEUIL
Hacia 1315, Felipe el Hermoso edificó una pequeña capilla despues de un peregrinaje a Boulogne Sur Mer y el bosque tomó desde entonces su nombre. Si bien bajo el reinado de Luis XI se abrieron dos rutas en el bosque y en 1531 Francisco I hizo construir el Castillo de Madrid, los primeros intentos estudiados de acondicionamiento del bosque comenzaron con Enrique IV, quien hizo plantar miles de moreras, con la esperanza de fomentar la producción de gusanos de seda. Era para entonces un paseo de moda, y a fines del siglo XVIII se habían construido hermosas residencias en los accesos del bosque, entre ellas el Castillo de la Muette y la Bagatelle.
En 1852 el bosque pasó a ser propiedad de la ciudad de París, la cual se hizo cargo de acondicionarlo como paseo público. Napoleón III encomendó la ardua tarea al Barón Haussman.
Una de las zonas más bonitas del bosque es la que ocupa el Parque de la Bagatelle. Los terrenos eran propiedad del Conde de Artois, a quien María Antonieta hizo una apuesta diciéndole que era imposible construir un palacio en dos meses, y lo consiguieros, la residencia de la Bagatelle estuvo terminada. Fue ampliada con una orangerie, el Trianón, caballerizas y un gran rosedal, donde cada año desde 1907 se realizan concursos internacionales.
Metro: PORTE-DAUPHINE, PORTE-D'AUTEUIL
20. Catacombes
Aquí descansan más de seis millones de personas. Consiste en una red de túneles y cuartos subterráneos que, durante el período romano fueron minas de piedra caliza y que desde fines del XVIII se convirtieron en cementerio.
Se le dio esta utilidad a partir de 1786 cuando los cementerios del lugar estaban totalmente llenos y las enfermedades causadas por el mal manejo de los cadáveres resultaban un peligro para la salud pública. Hasta 1870 se siguieron trasladando cadáveres.
Durante la Segunda Guerra Mundial fueron usados por la resistencia francesa y los alemanes instalaron un búnker subterráneo. En la actualidad los huesos aparecen dispuestos en forma de “muralla” donde se encuentran placas que identifican la procedencia de los huesos e incluso altares con epitafios en latín.
http://www.catacombes-de-paris.fr/
Duración de la visita: 45 minutes
Horarios: Martes-domingo: de 10 a 17 horas (la última entrada es a las 16 horas)
Tarifas: 8 € (hay tarifas reducidas: estudiante, jóvenes, grupos, mayores de 60 años,...)
Metro: Denfert-Rochereau
Dirección: 1, avenue du Colonel Henri Rol-Tanguy
Se le dio esta utilidad a partir de 1786 cuando los cementerios del lugar estaban totalmente llenos y las enfermedades causadas por el mal manejo de los cadáveres resultaban un peligro para la salud pública. Hasta 1870 se siguieron trasladando cadáveres.
Durante la Segunda Guerra Mundial fueron usados por la resistencia francesa y los alemanes instalaron un búnker subterráneo. En la actualidad los huesos aparecen dispuestos en forma de “muralla” donde se encuentran placas que identifican la procedencia de los huesos e incluso altares con epitafios en latín.
http://www.catacombes-de-paris.fr/
Duración de la visita: 45 minutes
Horarios: Martes-domingo: de 10 a 17 horas (la última entrada es a las 16 horas)
Tarifas: 8 € (hay tarifas reducidas: estudiante, jóvenes, grupos, mayores de 60 años,...)
Metro: Denfert-Rochereau
Dirección: 1, avenue du Colonel Henri Rol-Tanguy