Investigando sobre comida de otras culturas hemos descubierto los Faláfel. Pero antes de daros la receta, voy a contaros un poco sobre su origen e historia.
La palabra faláfel es de origen árabe (filfil) y cuyo significado es "pimiento".
Se cree que su origen está en el subcontinente indio, aunque otros piensan que viene de Egipto.
Se trata de una especie de croqueta o albóndiga cuya base son los garbanzos y/o habas. En la variante egipcia, sólo utilizan las habas, mientas que ne la variante de oriente se hace con habas, con garbanzos o con ambos.
Ingredientes Faláfel:
- 1/2 kilo de garbanzos (hay que dejarlos en remojo por lo menos 12 horas, para que se ablanden, ya que no se cuecen)
- 1 cebolla picada
- 1 diente de ajo
- 1 cucharada de cilantro
- 2 cucharadas de perejil
- Comino (nosotros no les hemos puesto comino...)
- 1 cucharada de bicarbonato
- Sal y pimienta negra
- Un poquito de cayena (si no os gusta mucho el picante, no le echéis mucha...)
- Dejar a remojo el día anterior (por lo menos 12 horas), después lavarlos y escurrirlos.
- Ponemos en la picadora los garbanzos ya reblandecidos junto con la cebolla, el ajo, el cilantro y el perejil y un poco de agua. Y mezclarlo!
- Una vez que tenemos los ingredientes anteriores bien mezclados, añadimos la sal, la pimienta, el comino, la cayena y el bicarbonato y lo mezclamos bien.
- Dejamos reposar la mezcla para que los ingredientes vayan absorbiendo los distintos sabores.
- Empezamos a formar bolas, que luego aplastaremos un poco. Si veis que tienen demasiada agua, siempre podéis "escurrirlas" cuando estáis formando la bolita, o bien añadir un poco de pan rallado y así será más consistente.
- Una vez que tenemos todos los Faláfel ya con su forma, los ponemos a freír en aceite a fuego medio-fuerte.